Efectivamente

Efectivamente
A: El Fundador Movimiento del Poético
Nuyorican, Miguel Algarin


Aunque cautivo
de silencios
y armadura
de palabras,

recurro de horizontes,
palpitando de anémonas
el zarpazo ágil
de la presencia impactada.

No por ligeras penas,
mis adelantos
se sucumben ante la insignia.

No por permisos y lúceros
la ampliada zozobra de los líquidos
autoriza de aires
el obstinado fuego
que no anuncian
los silbidos de la tierra.

Quizás,
de neutros,
calmo
el regreso
de los soles que roen
de sombras

sin que los apaciguados gritos
colmen de la tarde
el provocado anhelo
de la brisa.

A lo mejor,
en rápidos amaneceres,
pierdo de lontananzas
los aguaceros
que en la noche aguardan

hasta que se consuma
el último rayo
que cesa todavía.